Se ofrece una gran oportunidad de inversión para la explotación de unas magníficas instalaciones comerciales de 1151 m2 construidos en una la zona denominada “El Inglesillo”.

El edificio se encuentra distribuido en tres plantas que se delimitan en planta principal, planta alta y planta sótano.

En la planta principal posee dos grandes salones con techos de 7 metros de altura conectados por una sala destinada actualmente como cocina y almacén, patio central utilizado como terraza de verano, cocina totalmente equipada, 2 barras y baños también adaptados para personas con movilidad reducida.

En la planta alta, nos encontramos espacios perfectos para oficinas, terrazas y/o miradores. En la planta sótano, de pueden identificar tres espacios, el almacén que dispone de acceso directo con ascensor, equipado con cámaras frigoríficas, sótano 1 con acceso para vehículos y el sótano 2 que supone gran parte del subsuelo del edificio.

Es un edificio versátil, ofrece posibilidades tanto para el desarrollo de restauración, ocio familiar, celebración de eventos, bodas, bautizos, comuniones, cumpleaños, tal como está explotado en este momento y darle continuidad a una actividad que lleva funcionando desde hace más de 30 años, o bien, podría convertirse en un espacio donde establecer una gran superficie de alimentación puesto que se encuentra ubicado a pie de la arteria principal de entrada a Matalascañas, frente a toda la avenida de las Adelfas, plaza del Ayuntamiento y núcleo comercial de la urbanización, además de tener justo en frente la parada de autobuses y logística de todas las personas que vienen a la playa.

Durante el periodo estival, Matalascañas tiene una densa población que justifica perfectamente la inversión que supone una gran superficie, pero no hay que olvidar que, durante el resto del año, no sólo se cuenta con la población residente, sino que todos esos trabajadores de las empresas hortofrutícolas del territorio como por ejemplo Bionest, Los Mimbrales, etc.

La urbanización de playa de Matalascañas es una de las más conocidas de la provincia por ser uno de los principales focos de turismo de sol y playa, siendo la de mayor capacidad hotelera de la Costa de Huelva. Cuenta con una zona urbanizada, muy bien equipada.

Desde ella, se pueden visitar otros puntos de la comarca como El Rocío o Doñana. Debido a su calidad, ha sido consecutivamente calificada con la Bandera Azul desde al año 1993.

Vecinas a Matalascañas, se encuentran las inmensas playas del Parque Nacional de Doñana. A continuación de la playa de Matalascañas, se encuentra Torre La Higuera, playa que recibe este nombre por la enorme peña que aflora en su orilla. Esta roca es el último resto que queda de una de las torres almenaras que se distribuyen a lo largo de la costa onubense. Cuenta con todo tipo de servicios e infraestructuras para el disfrute del baño.